Los simulacros son importantes porque, a través de ellos, aprendemos la manera correcta de actuar durante una emergencia. Saber qué hacer es vital para salvar nuestra vida y la de las personas que nos rodean, sin embargo, hay quienes no toman en serio estos ejercicios y cometen errores en el camino.
Aquí dejamos algunos de los más comunes.
1. Restarle importancia
Escuchas la alarma que indica el inicio del simulacro y en vez de salir ordenadamente, continúas con tus actividades como si nada. O peor aún, en ese preciso momento se te ocurre ir al baño, servirte una taza de café o buscar tu celular para llevarlo contigo y no "aburrirte" durante todo el simulacro.
Lo correcto: Al escuchar la alerta, debes dejar todo lo que estés haciendo y salir inmediatamente del lugar en el que te encuentres. Hazlo con pasos apurados, pero siempre manteniendo la calma.
2. Usar el ascensor
Pese a que te han indicado en reiteradas ocasiones que deberías usar las escaleras de emergencia durante un simulacro, tú prefieres utilizar el ascensor porque te da flojera bajar las escaleras y claro, como es solo una práctica y no una emergencia real, crees que "no pasa nada".
Lo correcto: Seguir las indicaciones del personal de seguridad y usar las escaleras. Toma la baranda con una mano para no perder el equilibrio.
3. Conversar o usar el teléfono
Mientras bajas las escaleras, se te ocurre chatear con tus amigos sobre el estreno de tu serie favorita y te importa poco prestar atención al simulacro ya que, según tú, lo haz hecho "cientos de veces".
Lo correcto: No distraerse con conversaciones ni con el celular. Tener en todo momento los ojos puestos en el camino, sobre todo al bajar las escaleras y, así, evitar posibles accidentes.
4. Regresar a la oficina
A mitad del camino recuerdas que dejaste tu celular en el escritorio, entonces decides regresar por él sin importar que el simulacro continúe.
Lo correcto: Participar correctamente de un simulacro implica tomarlo como si se tratara de una emergencia real. Tus cosas materiales o redes sociales deben pasar a un segundo plano.
5. Pensar que es el mejor momento para hacer cualquier otra cosa que te provoque
Como cualquier momento es perfecto para relajarse y romper las reglas, aprovechas la oportunidad para fumar o ir a comprar unos dulces.
Lo correcto: Dirigirse al patio o lugar abierto y formarse sobre los círculos que están pintados en el piso. Permanecer ahí hasta que el personal de seguridad ordene que pueden volver al edificio.
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