Un sismo puede ocurrir en cualquier momento. Sin poder predecir su fuerza e impacto, es nuestra obligación como maestros y padres conocer y practicar acciones de preparación y respuesta a seguir en caso un fenómeno natural ocurra. Cuando elaboramos el plan de gestión del riesgo de la escuela identificamos las zonas seguras y rutas de evacuación. En el plan de contingencia frente al sismo nos permite estar listos para la respuesta en caso de que un sismo ocurra, es importante conocerlo y practicarlo, con el fin de evitar pérdidas humanas y del patrimonio de la escuela y comunidad
Desde antes de que el sismo suceda, ya podemos tomar acciones preventivas como inspeccionar la construcción en la que habitamos y corregir las deficiencias en las instalaciones de gas, agua y sistema eléctrico. Mantendremos siempre los pasillos y puertas libres de obstáculos, y prepararemos una mochila de emergencias que sea fácil de llevar.
Durante el sismo, conserve la calma y ayude a sus alumnos a evacuar ejecutando lo practicado. Las rutas deberán ser previamente identificadas y simuladas por los alumnos y personal, y en la medida de lo posible, señalizadas y/o alumbradas. Manténgase alejado de las ventanas y repisas que puedan caer. Si no puede salir, deberá ubicarse en las zonas de seguridad especificadas (muros estructurales, columnas) sin utilizar ascensores o correr por los pasillos. Una vez fuera, ubique las zonas de seguridad externas y espere a que el sismo pase.
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