Un simulacro es un ejercicio donde todos los miembros de una comunidad o institución, como tu escuela, participan de una emergencia ficticia para estar preparado ante un fenómeno natural como un terremoto u originado por el hombre como un incendio.
Aunque ‘ficticia’ significa que la emergencia no ocurre de verdad, participar de manera responsable de los simulacros ¡puede salvar tu vida! ya que te ayudará a saber qué tan preparado estás para enfrentar un peligro o amenaza, y aprender hacia dónde dirigirte, cómo reaccionar y qué hacer cuando todo suceda realmente.
Ya sea en tu escuela o en casa, tú puedes formar parte de la brigada de emergencias, excepto de las brigadas conformadas por adultos. Esto quiere decir que puedes tomar una función específica cuando se realice el simulacro. Por ejemplo: puedes ser el encargado de indicar por dónde deben evacuar las personas, o simplemente ayudarlos a estar calmados.
Los simulacros en la escuela se realizan con la participación de estudiantes, docentes, personal administativo y de servicio. Al finalizar el simulacro este es evaluado por la Comisión de Gestión del Riesgo. ¡Pregunta a tu profesor si puedes formar parte de alguna brigada de tu aula, e incentiva a tus compañeros y familia a organizarse!
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