Los sismos son movimientos vibratorios de la superficie terrestre provocados por el choque de las placas tectónicas en el interior de la tierra. Según su magnitud, podrán afectar a los seres humanos y los poblados. Comúnmente, denominamos temblor al movimiento que ocasiona susto, que es leve. En cambio el terremoto es más intenso y ocasiona destrucción y muertes.
En ese sentido, el terremoto es considerado más peligroso, mientras que el temblor no lo es tanto. Sin embargo, ambos pueden conllevar a graves consecuencias si no se adoptan medidas de prevención necesarias ya que, si bien los sismólogos (especialistas que estudian los sismos) han podido identificar ciertas zonas que son propensas a sufrir de temblores o terremotos, no podemos predecir en qué lugar y momento exacto ocurrirán, pero si sabemos que pasarán.
Por ello, no olvides de participar de la elaboración y en el cumplimiento del plan de gestión de riesgo de tu escuela y mantente alerta ante el llamado de tus profesores para actuar rápida e eficazmente en caso de sismo. La prevención puede salvar tu vida, así que recuerda a tus compañeros que hay que estar organizados e identificar las zonas seguras y rutas de evacuación para saber cómo actuar oportunamente.
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