“Como crecí con perros y gatos, me acostumbré a escuchar rasguños en mi puerta mientras dormía. Pero ahora que vivo solo, es mucho más inquietante”. Algunas personas sueñan todo el día con dormir, otras sueñan toda la noche con despertar. Tener una pesadilla es una experiencia desagradable que te levantará sudando frío. Son situaciones que tarde o temprano les suceden a todos.
¿Sientes que tienes pesadillas muy seguido? Investigaciones revelan que existe una relación entre la posición en la que dormimos y el tipo de sueño que tenemos. Vamos a darte unos consejos para que tengas las buenas noches que tanto quieres.
No duermas sobre el lado izquierdo del cuerpo
Un estudio publicado en la revista Sleep and Hypnosis indica que las personas que duermen sobre su lado derecho sufren menos pesadillas y, en cambio, tienen sueños que les dan sensaciones de alivio y seguridad.
Si quieres soñar más debes dormir boca abajo
En el año 2012 una investigación de la Hong Shue Yan University analizó los hábitos de sueño de casi 700 personas. Se concluyó que quienes dormían boca abajo tenían sueños más vívidos y positivos. “Creo que durante el sueño el cerebro no es totalmente ajeno al mundo exterior y los estímulos, incluidos aquellos derivados del entorno, se incorporan al contenido del sueño más a menudo de lo que la gente es consciente”, explicó Kai-Ching Yu, docente y parte del equipo de investigación.
La mejor postura para soñar es la peor para descansar
Aunque las investigaciones revelan que dormir boca abajo evita las pesadillas, los expertos indican que es la peor posición para descansar ya que la espalda adopta una posición forzada durante toda la noche. Además, si colocamos una almohada para nuestra cabeza seguramente sentiremos rigidez en el cuello la mañana siguiente. Recuerda: Dormir sobre el estómago es una de las causas más comunes de dolor de espalda.
Descansa de verdad
La mejor postura para dormir es boca arriba (sin almohada) ya que así se libera la tensión de las vértebras lumbares y la espalda se alinea perfectamente. Asegúrate una buena posición para dormir y te despertarás con los músculos relajados y la mente despejada.
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