¿Sabía que las alergias son respuestas inmunitarias de nuestro organismo frente a determinadas sustancias? Así como nuestro sistema inmunitario nos protege normalmente contra bacterias y virus, también reacciona ante sustancias extrañas llamadas alérgenos pero de manera exagerada o hipersensible. Al reconocer un alérgeno, nuestro sistema libera químicos como la histamina, los cuales provocan los síntomas de la alergia.
Entre los alérgenos más comunes se encuentran el polvo, polen o moho, hasta reacciones ante picaduras de insectos y componentes de algunos alimentos como nueces o mariscos. Si bien por lo general estas sustancias no son dañinas para la mayoría de personas, las alergias son muy comunes y pueden llegar a ser bastante molestas. Las principales señales de alergia pueden darse en la piel con la aparición de ronchas que pican y respiratorias con estornudos, picor en la nariz y lagrimeo en los ojos; y pueden llegar a ser más graves si causan dificultad respiratoria o disminución en la presión sanguínea.
Lo más recomendable para prevenir una alergia es reducir la exposición al alérgenos, por ejemplo, dejar de comer mariscos si somos alérgicos a ellos. Una vez desatada la respuesta alérgica, se usan también medicamentos para tratarlas. De ser una alergia grave, se debe acudir directamente al médico.
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