La vida escolar, las tareas, los conflictos familiares en casa y los cambios constantes pueden ocasionar cambios a nivel emocional en tus hijos, provocándoles estrés infantil. Por eso, no solo debes preocuparte por su salud física sino también por su salud mental. Antes de que entren en un cuadro de estrés, sigue estos consejos para prevenir esta enfermedad:
- Anima a tus hijos a enfrentar sus miedos: La mayoría del tiempo, los niños huyen de sus problemas, por lo que necesitan una mano que esté junto a ellos para que no teman y sepan que todo estará bien a pesar de las circunstancias.
- Está bien ser imperfecto: La constanste presión que ejerce la escuela e incluso la familia sobre todo lo que tiene que hacer, le hace pensar que debe ser perfecto en todo, lo que puede afectarle emocionalmente y generar angustia. Enséñale que está bien siempre esforzarse pero que también es bueno aceptar sus errores.
- Enfócate en los aspectos positivos: Que esta actividad empiece por mamá y papá. Estén atentos a sus necesidades y problemas, la mejor forma de apoyar a un pequeño es reconociéndole los aspectos positivos de sus talentos, aficiones, etc.
- Incluye actividades relajantes: Si tiene actividades extracurriculares, cancela algunas. En vez de eso, programa tareas para que se relajen y se puedan divertir juntos y en familia, como practicar deporte, pintar, leer o hacer lo que más le guste.
Recuerda que los niños crecen cada vez a mayor velocidad y esto puede complicar su salud mental. Tienes que estar atento a las señales desde ahora, porque ¡prevenir siempre es mejor!
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