Llamamos "atoro" o "atragantamiento" a la obstrucción de las vías respiratorias de una persona debido a un cuerpo extraño, que puede ser un pedazo de comida, golosina, o un objeto que se ha introducido a la boca. Cuando esto sucede, la persona tiene dificultad para respirar y si no se atiende de la manera más adecuada, podría asfixiarse e incluso quedar inconsciente o sin vida.
Cuando una persona se atraganta de manera leve, podrá toser e incluso hablar pues hay una obstrucción aérea parcial, por lo que debemos alentarla a seguir tosiendo hasta que el cuerpo extraño salga expulsado. Si en cambio observamos que la persona no puede hablar ni toser, o va perdiendo la conciencia por la falta de aire, debemos actuar rápidamente aplicando lo que se conoce como la maniobra de Heimlich.
La maniobra de Heimlich consiste en ayudar a la persona a expulsar el cuerpo extraño siguiendo los siguientes pasos:
- Colocarse detrás de la persona, pasando nuestros brazos por debajo de sus axilas hasta la parte alta del abdomen.
- Cerrar un puño, colocándolo entre el ombligo y las costillas, agarrar ese puño con la otra mano.
- Tirar con fuerza hacia adentro y hacia arriba, como abrazando a la persona.
- Si la persona cae inconsciente, se debe alertar a los servicios de emergencia de inmediato. Recuerda que puedes iniciar resucitación cardiopulmonar solo de estar capacitado para ello.
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