Una intoxicación ocurre cuando algún elemento tóxico ingresa a nuestro cuerpo ya sea al ingerirlo, inhalarlo o al contacto con nuestra piel. Llamamos tóxico a todo aquello que puede llegar a hacer daño a nuestro organismo, lo que dependerá no solo de la cantidad consumida, sino también del tipo de tóxico y el tiempo de exposición a él. Si sufres u observas que alguien es víctima de una intoxicación, llama inmediatamente a un adulto y sigue las siguientes recomendaciones:
- Si el tóxico ha sido inhalado, lleva a la persona a un lugar más aireado para que pueda respirar mejor.
- Si el tóxico ha tocado la piel, habrá que lavarla con abundante agua.
- Si el tóxico ha sido ingerido y la persona aún está consciente, será importante esperar a los especialistas ya que no sabemos si la sustancia es corrosiva (p.e. lejía) y pueda hacer mayor daño a la persona.
- Si la persona está inconsciente, también esperaremos a los especialistas asegurando a la víctima colocándola en posición lateral, aflojando sus ropas y abrigándolo con una manta.
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