El ayuno intermitente es una práctica común hoy en día y en los últimos años ha ganado popularidad entre adultos como una estrategia para mejorar la salud y perder peso. Sin embargo, surge la pregunta de si este método también puede ser aplicado de manera segura en niños y si les ofrece algún beneficio. Para responder esta pregunta es importante saber qué es el ayuno intermitente, cómo se construye en términos de horarios, cuáles son sus aportes a la salud integral, etc. antes de pensar siquiera en aplicarlo en niñas y niños. Si tienes dudas o inquietudes sobre la salud de tu hijo o hija, te recomendamos contar con un seguro de salud, donde tendrás evaluaciones y una orientación adecuada.
¿Qué es el ayuno intermitente?
El ayuno intermitente es un patrón en términos de alimentación que alterna períodos de ayuno con períodos sin comer. A diferencia de las dietas convencionales que se centran en qué sí y qué NO comer, el ayuno intermitente se enfoca en cuándo hacerlo. Hay varias formas de ayuno intermitente que se diferencian por la cantidad de horas que pasamos sin ingerir alimentos y la frecuencia semanal con la que se aplican estos horarios.
- Método 16/8: (ayuno durante 16 horas y comer durante 8 horas)
- Método 5:2: Este enfoque implica comer normalmente durante cinco días a la semana y reducir la ingesta calórica a aproximadamente 500-600 calorías en los otros dos días no consecutivos.
- Ayuno en días alternos: Con este método, se alternan días de ayuno completo con días de comer normalmente. Durante los días de ayuno, se pueden consumir muy pocas calorías (generalmente menos de 500) o incluso ninguna.
- Método del ayuno de días completos: En este enfoque, se ayuna durante uno o dos días completos a la semana, limitando la ingesta de calorías durante ese período de tiempo.
- Ayuno de 24 horas: Este método implica ayunar durante un período de 24 horas, una o dos veces por semana.
- Método 12/12: Aunque no es tan restrictivo como otros métodos, este enfoque implica ayunar durante 12 horas y luego comer durante las siguientes 12 horas.
Beneficios potenciales del ayuno intermitente
El ayuno intermitente ha sido asociado con una serie de beneficios para la salud en adultos, que incluyen pérdida de peso, mejora de la sensibilidad a la insulina, reducción de la inflamación y promoción de la salud cardiovascular.
Cuando un adulto ayuna, el cuerpo pasa por una serie de cambios fisiológicos para adaptarse a la falta de ingesta de alimentos. Estos cambios pueden variar dependiendo de la duración del ayuno, pero en general, aquí hay algunas respuestas comunes del cuerpo durante el ayuno:
- Reducción de los niveles de glucosa en sangre
- Uso de glucosa almacenada
- Cambio en el metabolismo
- Reducción del apetito
Es esencial consultar a un profesional de la salud para determinar un enfoque adecuado y seguro.
¿Es adecuado el ayuno intermitente para niños?
Existen posturas y opiniones distintas con respecto a este tema, pero hay varias razones por las cuales los niños no deberían hacer ayuno intermitente sin una supervisión adecuada, pues los perjuicios podrían ser mayores que los posibles beneficios. Algunas de estas razones son:
Necesidades nutricionales en crecimiento: Los niños tienen necesidades nutricionales específicas debido a su rápido crecimiento y desarrollo. Limitar la ingesta de alimentos a través del ayuno intermitente puede interferir con su capacidad para obtener los nutrientes necesarios para un desarrollo saludable.
Riesgo de deficiencias nutricionales: El ayuno intermitente puede llevar a una ingesta insuficiente de nutrientes esenciales como proteínas, vitaminas y minerales, que son fundamentales para el crecimiento y formación de los niños.
Impacto en el rendimiento académico: La falta de nutrientes debido al ayuno intermitente, puede afectar negativamente el rendimiento académico y la concentración de los niños en la escuela. El cerebro no recibe suficiente energía y baja sus niveles de alerta, su capacidad de respuesta y comprensión.
Riesgo de trastornos alimenticios: Introducir a los niños en patrones restrictivos de alimentación como el ayuno intermitente, puede aumentar el riesgo de desarrollar una relación poco saludable con la comida y aumenta la probabilidad de desarrollar trastornos alimenticios en el futuro.
Impacto en el crecimiento: La restricción calórica y la falta de nutrientes durante el ayuno intermitente pueden afectar el crecimiento y desarrollo físico con consecuencias en la salud emocional de los niños, especialmente durante etapas de cambios importantes.
Siempre es mejor priorizar una alimentación equilibrada y saludable para los niños, en consulta con un profesional de la salud si hay preocupaciones sobre la alimentación o el peso.
Consideraciones importantes
Si están pensando en incorporar el ayuno intermitente como parte del plan alimenticio de sus hijos, es crucial hacerlo bajo la supervisión de un profesional de la salud capacitado en todo momento y con el compromiso de controles regulares para monitorear la evolución de los niños. Pero antes de tomar esta decisión, se deben tener en cuenta factores como la edad, estado de salud general, cantidad de actividad física y las necesidades calóricas y nutricionales específicas de cada niño. Es importante recordar que la elección del método de ayuno intermitente depende de las preferencias personales, el estilo de vida y las necesidades individuales de cada persona, especialmente en el caso de los pequeños, para garantizar que sea seguro y apropiado para su edad y estado de salud. La mejor opción para un cuerpo sano, fuerte y ágil es el ejercicio, una alimentación balanceada y horas suficientes de descanso. Si tus pequeños tienen estos tres puntos cubiertos, no necesitarán dietas ni ayunos.
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