¿Tu hijo o hija se ha quejado de un dolor fuerte en las piernas o en el vientre sin razón aparente? Puede que se deba a un calambre por calor. Estos espasmos musculares involuntarios y dolorosos suelen ocurrir durante el ejercicio intenso en ambientes calurosos. Si bien son molestos, no suponen algo grave y suelen desaparecer después de unas horas.
¿Qué hacer en estos casos? ¿Cómo prevenir los calambres por calor en niños? En este artículo, resolvemos tus dudas.
Cómo prevenir los calambres causados por el calor en los niños y qué son exactamente
Los calambres por calor generan dolor y pueden ser bastante molestos. Suelen ocurrir durante la realización de actividades físicas intensas y en ambientes calurosos. La pérdida de líquido y electrolitos por medio del sudor a menudo contribuye a este malestar.
Estos espasmos involuntarios pueden ser más intensos y prolongados que los típicos calambres nocturnos en las piernas. Por lo general, se presentan en los músculos de las pantorrillas o de los muslos, de los brazos, la espalda y la pared abdominal, pero pueden afectar a cualquier grupo muscular que se utilice al ejercitar. En algunos casos, puede haber tensión o espasmos también en las manos.
Los pequeños que sufren estos calambres no presentan fiebre ni otro síntoma de gravedad, y se sienten mejor una vez que hayan tomado líquidos y se hayan enfriado. La molestia debería desaparecer en unos minutos u horas.
Qué hacer durante un calambre por calor
Si tu pequeño o pequeña está sufriendo de un calambre por calor, lo recomendable es hacer lo siguiente:
- Deja que descanse en un lugar fresco.
- Ofrécele jugo de fruta sin pulpa.
- Ayúdalo a realizar estiramientos suaves de flexibilidad articular.
- Masajea suavemente el grupo muscular afectado.
- Asegúrate de que no continúe la actividad intensa durante varias horas o más después de que desaparezcan los calambres por calor.
- Llama al pediatra si los calambres no desaparecen en menos de una hora, aproximadamente.
Cómo prevenir los calambres por calor en niños
Si bien realizar ejercicio intenso en un ambiente muy caluroso puede ser el detonante de un calambre por calor, hay ciertos factores que debemos tener en cuenta para prevenir que este malestar aparezca en los niños. ¡Toma nota!
- Asegura una buena nutrición y alimentación equilibrada. Esto garantiza la reposición de sodio, el electrolito que se pierde mayoritariamente por el sudor.
- Anímalos a realizar un calentamiento previo a la actividad física, para que sus cuerpos se aclimaten poco a poco.
- Asegúrate de que los niños deportistas sean guiados por un profesional que les indique la manera correcta de realizar el ejercicio o la técnica adecuada de la actividad deportiva.
- Los niños deben mantenerse hidratados. Hay que asegurarse de que los pequeños beban la suficiente agua antes, durante y después de cualquier tipo de actividad física.
- Lo mejor es evitar que los pequeños hagan ejercicio intenso en días muy calurosos. Los golpes de calor en niños y bebés son comunes en la temporada de verano.
Estas recomendaciones son muy útiles para prevenir los calambres por calor en niños y evitar que sufran las consecuencias de las altas temperaturas de la temporada de verano. Sin embargo, si tu pequeño sufre estas molestias con frecuencia o presenta otros síntomas adicionales, lo mejor será que consultes con su pediatra para descartar cualquier afección subyacente.
Fuente:
www.mayoclinic.org
www.childrenscolorado.org
www.msdmanuals.com
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