Una de las expectativas que solemos tener los padres con nuestros hijos es la de que logren las mejores calificaciones en la escuela. En situaciones en las que las notas no sean buenas, lo importante es olvidarnos de poner un castigo e indagar en el porqué de su bajo rendimiento. De esta manera, podremos encontrar soluciones y evitar que los pequeños asocien los procesos de aprendizaje con experiencias negativas. Para ello, te dejamos algunos pasos a seguir cuando los niños sacan malas notas.
¿A qué se deben las malas notas de un niño en el colegio?
Primero, debemos entender y averiguar qué hace que nuestros hijos tengan bajas calificaciones. No debemos pensar simplemente en que el niño no quiere sacar buenas notas, o que no quiere estudiar, o que no quiere hacerle caso a sus padres. De hecho, un niño puede esforzarse mucho y, aún así, jalar un curso. Tenemos que ir más allá.
Cuando nuestro hijo saca malas notas, nos indica que algo no va bien. Por alguna razón, el niño no alcanza los objetivos. Esto puede indicarnos lo siguiente:
- Falta de hábito en el estudio: Puede que haga falta aplicar una estrategia eficiente a la hora de estudiar. El pequeño debe aprender a aprender. Los niños no nacen sabiendo estudiar y muchos de ellos tienen dificultades para desarrollar esta capacidad.
- Poca motivación: Si un niño no se encuentra motivado para algo, no va a querer hacerlo. La motivación determina con cuánta energía y ganas nos enfrentamos a algo. Esta juega un papel determinante en el aprendizaje de los niños, ya que les predispone a enfrentarse a aquello que tienen que aprender con más ilusión y entusiasmo. Así, el aprendizaje se produce de una forma más sencilla. Sin embargo, la disciplina es la clave para crear el hábito del estudio. La motivación nos impulsa, pero la disciplina nos mantiene.
- Dificultades de aprendizaje: Cuando notamos que nuestro hijo tiene dificultades para sacar buenas calificaciones en varias asignaturas, pese a que se esfuerza, hay que plantearnos que al niño le cuesta comprender y fijarnos si no hay alguna incapacidad que se los impida. En estos casos, la comunicación entre profesores y padres ayudará a decidir cuál es la mejor estrategia para ayudar al pequeño. Puede ser conveniente contar con la opinión de un pedagogo o psicólogo infantil.
- Falta de esfuerzo: Algunos niños pueden estar acostumbrados a obtener las cosas sin esfuerzo. No comprenden la necesidad de dedicar voluntad para lograr algo. Debemos explicarles que hay cosas que necesitan de nuestra dedicación, esfuerzo y disciplina.
- Problemas emocionales: Cuando un niño está pasando por momentos difíciles, ya sea en casa o en el colegio, puede sentirse abrumado por las emociones. Esto le puede ocasionar dificultad para concentrarse, y la concentración es muy importante para crear buenos hábitos de estudio en los niños. En estos casos, también es recomendable que acudamos a un psicólogo infantil.
- Mala alimentación: La nutrición infantil es la base de la salud en general y es vital para el desarrollo intelectual de los niños.
¿Calificaciones bajas? 7 pasos a seguir cuando los niños sacan malas notas
Es importante que los padres mantengamos la calma. Debemos afrontar la situación con una actitud de búsqueda de soluciones y no de reproches y castigos. Para ello, te damos algunos consejos.
1. No gritar
Gritar o levantarle la voz a los niños solo hará que se sientan más frustrados y que ya no quieran contarnos lo que les sucede. El pequeño se puede bloquear y sentirse muy mal, por lo que los adultos debemos ser comprensivos y hablarles con tranquilidad. De lo contrario, puede que se alejen de nosotros y no nos tengan confianza.
2. Apostar por una comunicación afectiva
Es importante que escuchemos a los niños. Ir más allá de lo que dicen y centrarnos en lo que sienten. Al igual que nosotros, es muy probable que también estén frustrados.
3. No exagerar
El buen rendimiento escolar es algo importante, pero no lo es todo. Las malas notas son solo eso. No es necesario mostrar actitudes negativas exageradas. El fracaso no debe ser entendido como algo negativo, sino como una oportunidad de esforzarnos y seguir intentando. Debemos darle ánimos a los niños y no hacerlos sentir mal.
4. Indagar en las causas
Es necesario preguntarle a nuestro hijo por qué cree que ha obtenido esas notas. A partir de su respuesta, podemos ver si es necesario consultar con especialistas. De esta forma, haremos que el pequeño reflexione sobre los motivos de su rendimiento y será más fácil encontrar una solución. Además, involucramos al niño en el proceso.
5. Mostrar cariño y apoyo
En todo momento, nuestro hijo debe sentir que nos preocupamos por él y que lo apoyamos. El tener menos nota que sus compañeros puede hacer que el autoestima del niño se vea afectada. Los padres debemos estar siempre de su lado para evitar que desarrolle miedos a los exámenes.
6. Motivarlos y ayudarlos a desarrollar interés en el estudio
Los padres pueden estimular la motivación de sus hijos con diferentes actividades. El objetivo debe ser que los niños tengan más ganas de seguir estudiando o de seguir esforzándose para aprender y mejorar en las notas. Es importante celebrar cada logro que tengan, por más pequeño que sea.
7. Establecer un plan de estudio junto a ellos
Este plan de estudios debe ser realista y motivador, siempre al ritmo del niño. Además, debemos plantearlo junto a nuestro pequeño para que se sienta incluido y quiera cumplirlo.
Recuerda que la paciencia es la clave. Debemos evitar generar estrés en los pequeños que de por sí ya la están pasando difícil. Estos pasos a seguir cuando los niños sacan malas notas te ayudarán en el proceso.
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