Se ha comprobado que el sufrimiento puede afectar el desarrollo cognitivo y el volumen cerebral de los niños. Muchos de los conflictos y problemas que se viven durante la infancia dejan secuelas en el desarrollo emocional del individuo y en la manera en la que se relaciona con otras personas. Si estas vivencias son traumáticas, pueden repercutir gravemente en el cerebro del pequeño.
Los terribles efectos del sufrimiento infantil en el cerebro de los niños
Diversos estudios realizados a niños huérfanos que vivieron años de privaciones antes de ser adoptados revelaron que las experiencias difíciles afectaron su estructura cerebral. Los resultados fueron comparados con el análisis de 21 niños adoptados que no estuvieron sometidos a esas condiciones tan difíciles durante su estancia en los orfanatos.
Luego de considerar diversos factores ambientales y genéticos, se concluyó que los niños que vivieron las experiencias difíciles tenían volúmenes cerebrales sustancialmente más pequeños que los niños que no sufrieron, sobre todo en el área frontal y prefrontal. También presentaron coeficientes intelectuales más bajos y síntomas de trastorno por déficit de atención e hiperactividad, probablemente relacionado con la reducción del volumen cerebral.
Básicamente, los niños que recibían más castigos físicos tenían menos materia gris en algunas zonas de la corteza prefrontal, una región relacionada con el control de impulsos y el comportamiento. Este efecto también repercutía en su desarrollo cognitivo y nivel intelectual a largo plazo, presentando un menor rendimiento educativo y signos de falta de atención e hiperactividad hasta la edad adulta. Es decir, a más castigos y sufrimiento durante la infancia, mayor deficiencia cognitiva en la niñez y adolescencia.
Otras consecuencias para la salud física
Algunos efectos físicos del abuso o la negligencia en niños pueden ocurrir inmediatamente si hablamos de golpes, pero otros pueden tardar meses o años en aparecer o ser detectables. Sin embargo, el maltrato de cualquier tipo puede causar problemas de salud en el futuro del niño como:
- Diabetes
- Enfermedad pulmonar
- Desnutrición
- Problemas de la vista
- Limitaciones funcionales
- Ataque al corazón
- Artritis
- Problemas de espalda
- Presión arterial alta
- Daño cerebral
- Migrañas
- Bronquitis crónica
- Enfisema
- Enfermedad pulmonar obstructiva crónica
- Cáncer
- Derrame cerebral
- Enfermedad gastrointestinal
- Síndrome de fatiga crónica
Consecuencias psicológicas del sufrimiento infantil
Los estudios han identificado vínculos entre el abuso y la negligencia de menores y los siguientes resultados psicológicos:
- Deficiencias en la memoria, el autocontrol y la flexibilidad cognitiva (capacidad de ver las cosas y situaciones desde diferentes perspectivas).
- Baja autoestima.
- Depresión
- Ansiedad
- Trastornos psiquiátricos durante la adultez
- Apego y dificultades sociales
- Problemas para formar y mantener relaciones saludables.
- Estrés postraumático
Consecuencias en el comportamiento
El maltrato durante la infancia puede afectar el comportamientos de la víctima cuando es adolescente y adulto. Estos comportamientos pueden ser:
- Prácticas sexuales poco saludables.
- Delincuencia juvenil que conduce a la criminalidad adulta.
- Consumo de alcohol y otras drogas.
- Perpetración futura del maltrato.
Queda claro que el sufrimiento infantil tiene efectos muy graves tanto en lo físico como en lo psicológico y social. Por ello, es muy importante que como padre protejas a tus hijos y te asegures de que vivan en un ambiente saludable.
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