Cómo identificar y tratar una herida infectada en los niños

  • hace 3 años

Los cortes, las heridas y arañazos son frecuentes en los niños pequeños. Por ello, es muy importante para su correcta cicatrización saber cómo curar todo tipo de heridas, cuáles son los errores más frecuentes o cuándo se necesitan puntos de sutura. En esta nota, te contamos cómo identificar y tratar una herida infectada en los niños.

Cómo identificar y tratar una herida infectada en los niños

Una herida se infecta cuando los microbios (bacterias, hongos, etc.) logran introducirse por el corte producido en la piel. Esto suele suceder cuando la herida no lleva ningún tipo de protección, desinfectante o antiséptico. Los microbios se instalan en los tejidos de la zona del corte impidiendo su curación y empeorando su estado.

Una herida puede ser un raspón, un corte o, incluso, una quemadura. Mientras más profunda sea, más propensa está de infectarse. Sin embargo, las heridas pequeñas, si no son tratadas adecuadamente, también pueden generar una infección. 

Cómo identificar una herida infectada en niños

Los síntomas que podemos notas cuando una herida está infectada son:

  • Dolor o sensación de pinchazos en la zona afectada
  • Enrojecimiento e hinchazón en el contorno de la herida
  • Calentura en la zona de la herida
  • Secreciones, como pus
  • Fiebre
  • Malestar general

Si la herida tarda en curarse o no mejora con el tratamiento, es probable que esté infectada. La infección es un riesgo común en este tipo de lesiones, especialmente, si se trata de un corte extenso y provocado por algún objeto punzante. De todos modos, es muy importante lavar con agua y jabón para limpiar la herida, ya que una vez que se ha producido una infección es más complicado.

Cómo tratar una herida infectada en los niños

Para evitar que una herida se infecte, debemos realizar una correcta limpieza de la misma en el momento en el que se ha producido, seguir limpiándola periódicamente. Si la infección ya apareció y es localizada, lo recomendable es hacer un buen lavado, un arrastre firme y suave con la gasa, y evitar el alcohol y el algodón. Este último suelta fibras que pueden impedir y crear problemas de cicatrización. También, es importante utilizar un buen antiséptico. Todo ello puede ser suficiente para controlar la infección.

Sin embargo, combatir la infección de una herida y aliviar los síntomas dependerá de la gravedad de la misma. Lo ideal sería consultar con un médico para que examine la lesión y, de ser necesario, le recete al pequeño los medicamentos adecuados.

Acudan a un especialista en caso el niño presente fiebre, malestar general, o tenga sensación de nauseas o vómitos. Lo mismo si la herida presenta un color oscuro o rojo fuerte en la parte central, dolor e hinchazón, pus o mal olor.

Cómo identificar y tratar una herida infectada en los niños

Qué no hacer al tratar una herida infectada en los niños

Muchas veces, podemos cometer errores frente a los accidentes más frecuentes, y las heridas son las más comunes. Ya sea por ignorancia o por la prisa que tenemos los padres al ver que nuestro hijo ha sufrido un accidente, podemos actuar de forma equivocada. Algunos errores frecuentes al curar una herida son los siguientes:

1. Usar un antiséptico como sustitutivo de un buen lavado.

El lavado con agua y jabón es fundamental, y es lo primero que debemos hacer ante una herida. Primero, limpiarla y lavarla bien, pero sin frotar muy fuerte. Lo que hagamos después ayudará, pero no podrá sustituir el lavado. Además, debemos saber cómo utilizar los antisépticos correctamente.. 

2. Usar algodón y alcohol.

Las fibras del algodón pueden quedarse pegadas en la piel dañada, por lo que no debemos usarlo en caso de herida, a menos que sea muy superficial y pequeña. Tampoco debemos aplicar alcohol en el corte, ya que esto solo le producirá mucho ardor al niño. Siempre va a ser mejor lavar con agua y jabón, pero con delicadeza y sin frotar muy fuerte.

3. Pinchar las ampollas cuando hay quemaduras.

Nunca debemos pinchar las ampollas que se producen por una quemadura. Esto, en lugar de acelerar la cicatrización, genera otra herida donde no había, con lo cual aumenta el riesgo de infección.

4. Aplicar remedios caseros sobre una quemadura.

Se cree que aplicar cremas caseras o hasta pasta dental puede aliviar el dolor de una herida de quemadura, pero no es así. De hecho, esto puede generar problemas en la cicatrización y producir una irritación en la piel. 

5. Medicar al niño sin orientación médica.

No debemos utilizar tratamientos farmacológicos, como pomadas antibióticas o antiinflamatorias con cortisona, sin haber consultado con un médico primero. Los medicamentos son tratamientos que deben ser recomendados por un especialista. 

Si tu pequeño ha sufrido un corte muy profundo y hay mucho sangrado, cubre la herida con un paño muy limpio y acudan a emergencias. Si el corte ha sido leve y crees poder manejarlo en casa, sigue estas recomendaciones. Ahora que ya sabes cómo identificar y tratar una herida infectada en los niños, podrás actuar de la mejor manera ante estos accidentes cotidianos.

Fuente:

www.guiainfantil.com

www.hacerfamilia.com

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