Estos días, en los que es más seguro permanecer en casa, pueden aprovechar para cocinar en familia e incluir a los niños en las actividades culinarias. De esta forma, los pequeños se mantendrán entretenidos y aprenderán algo nuevo. Si bien cocinar es divertido, es importante que tengan las precauciones necesarias para que la actividad sea segura y placentera. Para ello, te damos una guía de prevención para pequeños asistentes en la cocina.
Guía de prevención para pequeños asistentes en la cocina
Asegúrense de tener todos los ingredientes necesarios para la preparación y los utensilios que van a necesitar. Colóquense sus mandiles, sigan estas recomendaciones y… ¡a cocinar!
- Limpia y desinfecta muy bien las superficies y el área en la que van a cocinar. La idea es eliminar cualquier tipo de germen que pueda contaminar los alimentos y, por ende, enfermarlos.
- Delimita un lugar de trabajo para los niños, lejos de los cuchillos y el fuego, donde puedan estar siempre supervisados.
- Revisa que los ingredientes estén en buen estado o no hayan vencido.
- Antes de tocar los alimentos, lávense bien las manos, con agua y jabón. Esto es especialmente importante para recetas en las que es necesario amasar o mezclar ingredientes con las manos. Además, asegúrense de lavarse las manos antes y después de tocar carne, pollo, huevos o pescado crudos, ya que estos pueden contener bacterias.
- Procura que los niños no vistan nada que sea demasiado grande y holgado, ya que las mangas pueden incendiarse o quedar atrapadas en la batidora y otros electrodomésticos.
- Estén atentos a los alimentos calientes. Coloca las manijas de las ollas y sartenes hacia la parte posterior de la cocina, para no golpearlas y tirarlas accidentalmente.
- Los niños deben estar lejos de la estufa. Esta parte de la preparación para los adultos. Los niños pueden mezclar los alimentos, partir los huevos, medir la harina, pero nada que implique el fuego y los cuchillos. En todo caso, que todo sea siempre bajo la supervisión de un adulto.
- Si utilizan el microondas, usen recipientes aptos para ello. Nunca coloquen nada de metal ni papel aluminio dentro del microondas.
- Para evitar quemaduras, utilicen agarraderas o guantes de horno (no usen paños o secadores) al sujetar ollas o bandejas calientes.
- Al finalizar, asegúrense de limpiar bien todo y guardar las sobras en recipientes herméticos. Los niños también pueden ayudar con la limpieza.
Recuerda que tus pequeños ven esta actividad como algo divertido. Ten paciencia con ellos y déjalos participar activamente. Evita decirles “no” o palabras negativas, si derramaron algo o no siguieron las instrucciones. Deja que se equivoquen y aprendan por sí solos.
Cocinar con tus hijos es una excelente forma de generar un vínculo entre ustedes, propiciando una convivencia familiar saludable y desarrollando habilidades blandas, como el trabajo en equipo, la toma de decisiones y la organización. Esta actividad también potencia la creatividad y autonomía en los más pequeños. Además, puedes aprovechar para enseñarles la importancia de tener buenos hábitos alimenticios. Anímense a preparar algo rico para compartir y disfrutar de su propia creación culinaria.
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