¿Has notado desinterés por parte de tu hijo o hija en sus actividades preferidas? ¿Duerme más de lo normal o tiene insomnio? Además, ¿has notado un cambio en sus hábitos alimenticios? Si es así, puede que se deba a un cuadro de depresión. La depresión en adolescentes puede ser un grave problema de salud mental y suele identificarse por ciertos comportamientos distintos a los habituales. ¿Cómo saber si tu hijo está pasando por este trastorno mental? Te contamos todo lo que debes saber.
¿Cómo saber si un adolescente pasa por un cuadro de depresión?
La adolescencia puede llegar a ser complicada. En esta etapa, se generan en la persona una serie de cambios físicos y psicológicos importantes. De hecho, es uno de los periodos más críticos para el desarrollo de la autoestima, ya que es la etapa en la que la persona necesita hacerse con una firme identidad, conocer sus virtudes, su talento y sentirse valioso como persona que avanza hacia un futuro.
Es normal que los adolescentes tengan alteraciones del estado de ánimo y puede ser difícil identificar si simplemente están tristes o si realmente están deprimidos o deprimidas. Por eso, es muy importante que los padres estemos atentos ante las señales y poder actuar pronto. Si tu hijo tiene entre 12 y 18 años, no está de más acudir a un psicólogo para un chequeo emocional y mental, aunque no notes signos de ningún problema.
Sin embargo, si notas alguno de los siguientes síntomas de depresión en alguno de tus hijos adolescentes, es muy importante y necesario llevarlo a un especialista de la salud mental.
- Se le ve triste o irritable todo el tiempo
- Llora frecuentemente y sin razón aparente
- Parece tener dificultad para concentrarse o recordar cosas
- Tiene baja autoestima
- Se suele alterar con facilidad
- Se culpa y critica excesivamente
- Pierde interés en sus actividades preferidas
- Se queja de dolores y malestares que no tienen una causa aparente
- Duerme demasiado o no puede dormir (insomnio)
- Cambio de los hábitos alimenticios: come mucho más de lo normal o tiene dificultad para comer (falta de apetito)
- Consume drogas y/o alcohol
- Bajo rendimiento académico
- Piensa en la muerte o en el suicidio (asume riesgos peligrosos o se autolesiona)
- Pasa cada vez menos tiempo con los amigos y la familia
- Se expresa con pesimismo
Lo cierto es que es bastante frecuente que un adolescente muestre signos de depresión, por lo que lo mejor es que lo diagnostique un especialista de la salud mental. Muchas veces, puede deberse a otra cosa, pero es necesario determinar la causa y, en caso se trate de depresión, el o la adolescente deberá llevar un tratamiento adecuado. Esta enfermedad es muy común y se puede tratar con asesoramiento, terapia y/o medicamentos (recetados por un psiquiatra). De lo contrario, la condición podría agravarse y llevar a otros trastornos.
¿Cuáles son las causas de la depresión en adolescentes?
Las causas de la depresión en adolescentes son variadas, pero existen algunas situaciones que pueden aumentar las probabilidades de que un adolescente tenga depresión. Entre ellas están:
- Sufrir una gran pérdida (muerte o divorcio en la familia)
- Vivir con alguien que está deprimido
- Tener otro problema de salud mental (ansiedad o un trastorno alimenticio)
- Sentir estrés en el colegio o en casa
- Tener antecedentes de depresión en la familia
Si bien la depresión puede manifestarse tanto en hombres como en mujeres, las jóvenes adolescentes tienen más probabilidad de deprimirse que los varones adolescentes. Esto se debe a los factores hormonales relacionados con el ciclo reproductivo, los cuales pueden jugar un papel en la vulnerabilidad de las mujeres a deprimirse. Los estrógenos y la progesterona han mostrado su efecto sobre los sistemas de neurotransmisión, neuroendocrino y circadiano, los cuales han sido implicados en los trastornos del humor.
Aún así, cualquier persona puede sufrir depresión. Si tu hija o hijo está deprimido, no es culpa tuya ni de él o ella. Buscar culpables no ayudará a mejorar la situación.
¿Cuál es el tratamiento de la depresión en adolescentes?
Al acudir a un especialista en salud mental, éste le hará diversas preguntas al adolescente sobre sus sentimientos y comportamientos. Le puede preguntar con qué frecuencia le suceden las siguientes cosas:
- Se siente triste o sin esperanzas
- Tiene poca energía o siente cansancio
- Tiene dificultad para prestar atención en el colegio
- Come demasiado o tiene dificultad para comer
Por lo general, la prueba para detectar la depresión dura unos 5 minutos. Es rápido y muy importante realizarlo. Si el especialista nota síntomas de depresión, éste puede:
- Hablar de medicamentos o de otros tratamientos que podrían ser útiles para el grado de depresión del adolescente.
- Pedir otras pruebas para descartar otros problemas de salud.
- Derivarlo a otro especialista más indicado para el tratamiento.
La detección temprana de este trastorno puede ser de mucha ayuda a la hora de manejarlo. La salud mental de nuestros hijos es igual de importante que su salud física. Hay que estar atentos a las acciones o palabras de nuestros hijos e hijas, ya que muchas de las señales de la depresión pueden pasar desapercibidas.
Si notas un cambio en su comportamiento, anota cómo y cuándo sucedió. Esa información puede serle útil al especialista en salud mental. Si necesitas ayuda sobre cómo llevar la situación, no dudes en pedirla. También hay asesoramiento para padres con hijos con depresión.
Finalmente, hay que recordar que la comunicación es clave en toda relación. Comunicarnos asertivamente es necesario para entendernos con nuestros hijos. Del mismo modo, es importante escucharlos y tomar en serio sus opiniones. Al mantener un vínculo cercano, es más posible saber si un adolescente pasa por un cuadro de depresión.
Fuente:
https://health.gov
www.mayoclinic.org
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