No se trata de una falta de responsabilidad o de un desgano por aprender, mucho menos de una falta de respeto. Que un niño se quede dormido en el colegio puede deberse a algo mucho más serio. ¿Tu hijo se duerme en clase? En esta nota, te contamos algunas razones por las que esto puede estar pasando y qué puedes hacer al respecto.
¿Tu hijo se duerme en clase? Te contamos 6 razones y qué hacer al respecto
Es muy común que, alguna vez en su etapa escolar, un niño o niña se duerma durante clases. Esto puede ser porque la noche anterior no tuvo un buen descanso o porque está empezando a desarrollar una gripe. Sin embargo, si tu hijo se duerme en clase con mucha frecuencia, puede deberse a lo siguiente:
1. Malos hábitos de sueño
Cuando los niños se quedan despiertos hasta tarde por la noche, es muy probable que al día siguiente estén cansados y sin energía suficiente para realizar sus actividades con normalidad. Entonces, no sería raro que se quedaran dormidos en el salón. Para ver si es esta la razón por la que tu hijo se duerme en clase, asegúrate de que duerma bien por las noches. Ten en cuenta que los niños deben dormir cierta cantidad de horas, según su edad. Si tu pequeño o pequeña tiene problemas de sueño, hay formas en las que puedes ayudarle a dormir.
Uno de los motivos por los que los niños y niñas se quedan hasta tarde despiertos es por quedarse jugando o viendo televisión. Evita que tu pequeño o pequeña utilice dispositivos electrónicos antes de acostarse. La luz azul de las pantallas puede interferir con su capacidad para dormirse y mantenerse dormido.
Por otro lado, hay ciertos alimentos que afectan el sueño de los niños. Las golosinas o comidas muy grasosas, o las bebidas con cafeína (como las gaseosas) son estimulantes. De igual forma, beber mucho líquido antes de dormir, puede hacerles querer ir al baño durante la noche e interrumpir su sueño.
Ahora, también podría ser que el niño o niña se acueste temprano, pero que las pesadillas le despierten varias veces durante la noche. En estas situaciones, hay maneras de ayudar a los niños a dormir sin tener pesadillas. Las pesadillas son normales entre los 3 y 6 años de edad, aunque pueden aparecer antes y seguir hasta más allá de los 7 u 8 años.
2. Mala alimentación
¿Sabes qué es lo que le pasa al cerebro de los niños si no se alimentan bien? La alimentación es clave en la infancia y, sobre todo, en la etapa escolar. De hecho, en los primeros tres años de vida, se desarrolla más del 80% del cerebro. Por ello, es importante que los niños tengan una dieta balanceada, variada y rica en nutrientes, para poder rendir en clases, tener energía para realizar sus deberes, concentrarse y aprender más.
Las investigaciones han asociado las deficiencias y carencias nutricionales a diferentes problemas de salud y conducta. Por eso, más que pensar en cantidad, hay que priorizar la calidad de los alimentos que le damos a nuestros hijos. Recuerda que no solo la desnutrición sino también la mala nutrición puede afectar la salud y el desarrollo adecuado de los niños y niñas.
Un buen desayuno es vital para que nuestros hijos empiecen con mucha energía su día. Que un niño se salte esta comida no solo afectará de manera negativa a su salud, sino también a su rendimiento escolar, ya que se sentirá mareado, débil y tendrá dificultad para concentrarse a causa del hambre. Hay que recordar que la anemia infantil, muchas veces, se debe a una mala alimentación y suele repercutir en el desempeño académico de los niños.
3. Falta de hidratación
La falta de hidratación puede causar cansancio, somnolencia o mareos. Beber agua y mantenerse hidratado es vital en la vida de todo ser humano. Diariamente, a través del sudor, orina y transpiración perdemos agua que debemos reponer durante el día mediante alimentos y bebidas. En el caso de los niños, la cantidad de agua que deben consumir al día varía según su edad y actividad física. Sus requerimientos serán acordes a la proporción de su cuerpo y sus necesidades.
4. Enfermedad
La gripe y otras enfermedades virales suelen ocasionar fatiga y cansancio, al igual que otras infecciones recurrentes. En estos casos, debemos evitar que nuestros hijos vayan al colegio hasta que estén totalmente recuperados. Esto no solo para evitar contagios, sino también para permitir que el pequeño o pequeña descanse, beba el suficiente líquido, se alimente bien y así se recupere.
Por otro lado, hay enfermedades infantiles causadas por la falta de vitaminas que es necesario conocer. Por eso, es muy importante que la nutrición de tu pequeño sea la correcta para su edad y sus necesidades. Si crees que tu hijo puede tener alguna deficiencia en vitaminas, acude a su pediatra para que te indique cuál es necesaria suplementar o potenciar en su dieta.
5. Poca actividad física
Otra de las razones por la que los niños pueden estar con poca energía es la falta de actividad física regular. Los niños y niñas deben utilizar al menos 30 minutos del día para mantenerse activos. Esto no solo ayudará a que se relajen, sino también les puede ayudar a mantenerse en un peso adecuado, a tener mayor vitalidad y a tener menos probabilidades de padecer enfermedades, obesidad, diabetes, entre otras afecciones.
6. Aburrimiento
Por naturaleza, los niños son curiosos e inquietos (algunos más que otros). Por eso, es normal que se aburran con rapidez y quieran pasar a otra actividad. Además, puede que los métodos de enseñanza que está recibiendo no sean los indicados para tu pequeño o pequeña. Es importante que su aprendizaje se base en actividades dinámicas. El juego, por ejemplo, es una excelente herramienta de aprendizaje, sobre todo, en niños pequeños.
Estas son algunas razones por las que tu hijo se duerme en clase. Si bien hay ciertas cosas que podemos hacer para evitarlo, si se queda dormido o dormida con frecuencia en el colegio, será mejor consultar a su pediatra o algún especialista. Cuanto antes se detecte la causa, más pronto podrán tomarse las medidas necesarias.
Fuente:
https://kidshealth.org
https://tecnicasparadocentes.com
www.educapeques.com
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